27.2.03

Nada mejor que una mañana lluviosa, una tarde nublada y una noche tranquila.
Hoy pasé gran parte del día pintando. Tengo los dedos mochos de pintar con lápiz. Odio pintar con lápices. Me embola. No es divertido llenar una hoja blanca nº 6 de trazos de colores "brillantes" y "alegres". Pero... bue, como buena alumna que soy (ja!!), terminé mi canasta de duraznos (parece cualquier cosa, menos eso). Me imagino los primeros comentarios cuando alguien lo vea: "ayyy! que lindo arbusto con... flores? o son mariposas que se asoman?".
Desobedeciendo a los consejos que dicen que primero tengo que "manejar bien los lápices", estoy terminando mis propios dibujos, con óleos, a mi estilo, con los colores que yo quiero.
Y aunque como broche de oro logré una bonita mancha de óleo negro en la pared (que espero que nadie note), me siento bien, relajada, y conforme con mis obras (obras?).
Así es, dejen de gastar $$$ en el psicólogo: nada mejor que enchastrar cosas con pintura.

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