dan ganas de matarlo, porque ve que está todo amontonado en el living y se le ocurre decir: "te acordás que yo tenía una cinta así de ancha? dónde puede estar?". lo mismo pasó hace 12 años, mientras descargábamos el camión de mudanzas: "dónde está mi cepillo de dientes??!". a veces es tan desubicado como el pedacito de cerámica verde que tengo en el bolso.
todavía no logro darme cuenta si está contento o todo esto lo fastidia. o las dos cosas. no sé. cuando le digo "acá estaría bueno que hagamos esto" suele responderme "ay, fiaks, vos querés volar", pero al final termina considerando mi propuesta y dice "va a quedar lindo". con mi edad le pasa lo mismo, no se pone de acuerdo. "mirá lo que te compré": y saca de la bolsa un peluche, de esos que tienen musiquita simpática. y otras veces me dice "no sabés que linda ropa vi para vos en la boutique de nérida" (boutique de nérida = ropa de señora grande)
espero que no sea un mal de familia y que cuando yo diga el día que me enoje con vos, no me ves nunca más no me pase lo mismo que a él y esa decisión termine convirtiéndose en bueno, esta vez te perdono.
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